En el dinámico mercado laboral de España, es fundamental estar informado sobre los distintos tipos de contratos de trabajo disponibles. La legislación laboral española ha ido evolucionando para adaptarse a las necesidades del mercado y proporcionar tanto a empleadores como a empleados opciones variadas que se ajusten a diversas situaciones laborales. A continuación, exploramos los tipos de contratos de trabajo más comunes en España tras la reforma laboral.
¿Cuáles son los tipos de contratos de trabajo disponibles?
1. Contrato Indefinido
El contrato indefinido es el más deseado por los trabajadores, ya que no tiene una fecha de finalización establecida y ofrece estabilidad laboral. Dentro de este tipo, se incluyen varias modalidades:
- Contrato Indefinido Ordinario: Es el contrato estándar que no tiene una duración determinada.
- Contrato Indefinido de Apoyo a los Emprendedores: Diseñado para empresas con menos de 50 empleados, proporciona beneficios fiscales y bonificaciones en las cotizaciones a la Seguridad Social.
2. Contrato Temporal
Este contrato tiene una duración determinada y se utiliza para necesidades específicas. Las modalidades incluyen:
- Contrato por Obra o Servicio Determinado: Para realizar trabajos concretos para cubrir situaciones ocasionales, previsibles o con una duración determinada, como por ejemplo la campaña de Navidad.
- Contrato Eventual por Circunstancias de la Producción: Para atender exigencias circunstanciales del mercado, acumulación de tareas o exceso de pedidos. Si en un periodo de dos años, la persona contratada más de 18 meses con contratos por circunstancias de la producción, adquiere la condición de trabajadora fija.
Este tipo de contratos sólo puede hacerse un máximo de 90 días por año.
3. Contrato a Tiempo Parcial
Puede ser indefinido o temporal y se caracteriza porque la jornada laboral es inferior a la de un trabajador a tiempo completo. Es ideal para aquellos que buscan conciliar la vida laboral y personal.
4. Contrato de Formación en alternancia
Orientado a jóvenes entre 16 y 30 años que carezcan de la cualificación necesaria para un contrato indefinido. Combina trabajo remunerado con formación teórica y práctica. Puede realizarse en un periodo desde 3 meses hasta máximo 2 años. Este contrato no tiene coste para el empleador. Es el contrato bonificado que más ventajas aporta a la empresa. Puede ser a jornada completa o parcial. Durante el primer año, el 65% se dedica al trabajo y el 35% a la formación. En el segundo año, el 85% se dedica al trabajo y el 15% restante a la formación.
5. Contrato en Prácticas
La duración del contrato tiene un mínimo de 6 meses y un máximo de un año. Destinada a personas que hayan obtenido un título universitario, grado medio o superior, certificado de profesionalidad o un máster profesional. El objetivo es que los usuarios adquieran habilidades específicas y mejoren su empleabilidad. En estos contratos el trabajador no tiene derecho a indemnización, pero si cotiza y tiene derecho a vacaciones.
6. Contrato Fijo-Discontinuo
Utilizado para trabajos que no se repiten en fechas ciertas, pero que son de naturaleza cíclica o previsible. Es común en sectores como el turismo. Este tipo de contratos permite tener una relación laboral continua y ofrece cierta estabilidad a los trabajadores.
7. Contrato de Relevo
Vinculado a la jubilación parcial de un trabajador. Permite que un trabajador ocupe el puesto de quien se jubila parcialmente, facilitando así el relevo generacional en la empresa. Puede ocupar el puesto una persona desempleada, o un trabajador de la empresa que mejore sus condiciones.
La elección del contrato de trabajo
Los tipos de contratos de trabajo en España siguen evolucionando para adaptarse a las realidades económicas y sociales del país. Las reformas laborales y las políticas de empleo buscan equilibrar la flexibilidad para las empresas con la seguridad para los trabajadores. Comprender las diferentes modalidades de contrato es esencial tanto para empleadores como para empleados, ya que cada tipo ofrece ventajas y características específicas que pueden ser cruciales en la toma de decisiones laborales.
Para empleadores, es importante analizar las necesidades de su empresa y elegir el tipo de contrato que mejor se ajuste a sus requerimientos y al perfil del empleado. Para los trabajadores, conocer sus derechos y las características de cada tipo de contrato puede ayudarles a tomar decisiones informadas sobre su carrera profesional.
Cumplir con la normativa vigente, mantenerse informado sobre la actualidad legislativa y aprovechar las ventajas que cada tipo de contrato ofrece, es fundamental para el buen funcionamiento del equipo humano y de la empresa. Si necesitas asesoramiento, desde Clearcorp podemos ayudarte.
